Fragas do Lecer – Godello – D.O. Monterrei.

Godello, Treixadura y Dona Branca.

The vines here are 30 years old on average, yielding small amounts per vine but high concentration. Harvested by hand, with a preliminary selection in the vineyard. Temperature controlled fermentation, and then aged in stainless steel on fine lees for 7 months, followed by at least 5 months in bottle before release; unfined and unfiltered. Floral aromas lead to intense fruit notes of apple, pear, citrus and aromatic herbs. On the palate it shows creamy texture, with well-balanced and pleasant acidity; fresh fruit notes are balanced with mineral. Luscious with a well-rounded finish.

60% Godello, 35% Treixadura and 5% Dona Branca.

 

Fragas do Lecer

Fragas do Lecer is located in Vilaza, Galicia, in Northwest Spain. It sits in the valley of Monterrei alongside the Támega river. The winery was founded in 2005 by the Boo-Rivero family, winegrowers with a history of over 30 years. They are especially committed to growing indigineous varietals.

The vineyards total 45 acres, in 28 different estate vineyards. This diversity results in various soil types: granite based, sandy, and slate, offering great complexity to the wines. The Tamaguelos estate has over 10 acres of Godello and Mencia vines that are over 30 years old. In addition, they also have some of the oldest Godello and Mencia vines in the region, over 50 years old.

Fragas do Lecer practices organic viticulture, with maximum respect for the vineyards and minimum intervention.


 

DO Monterrei

Monterrei is a DO wine region in Galicia, northern Spain. It is located in the south-eastern corner of Galicia, bordering Portugal. Winemaking was introduced to the area by the ancient Romans, whose influence is confirmed by the number of presses and vessels that have been dug up here.

In 1994, Monterrei regained the DO status that had been stripped from it because local producers failed to modernize their wineries sufficiently. Since then, it has won acclaim, including commendations from the influential American wine critic Robert Parker in 2008.

Monterrei is situated in the Duoro River basin, although it is the Tamega River – a tributary that eventually flows into the Duoro near Marco de Canaveses in Portugal – that is important here. Most vines are planted in the river valleys along the Tamega.

Monterrei is divided into two sub-zones: Ledeira de Monterrei (Slopes of Monterrei) and Val de Monterrei (Monterrei Valley). The division is a natural split, largely due to differences in the soil types, from granite to slate to clay. These give wines distinctive characteristics.

Climatically, the region is very different from the rest of Galicia. Monterrei's inland location makes it warm and dry during summer and very cold in winter, more in line with the vineyards of Castilla y Leon to the east. This is largely due to the rain shadow effect produced by the Sierra de Larouca mountain range. Monterrei is subject to diurnal temperature variations of up to 30 degrees in the ripening season.

Both red- and white-wine grape varieties can reliably be ripened in Monterrei's climate, although aromatic whites dominate production here, as they do throughout most of Galicia. The principal white-wine varieties, in descending order, are Godello (Verdelho) Treixadura, Dona Blanca and Albarino, which produce wines savored for their distinct fruitiness, crisp acidity and reasonably good body. Red wines are made from Mencia and Merenzao (Trousseau) grapes, which are typically fresh and full bodied.

The Consejo Regulador (wine-regulating authority) allows the production of two wines: Monterrei Blanco (white Monterrei), which must contain 60 percent of the preferred varieties (Godello, Treixadura, Doña Blanca), with the remaining 40 percent from other permitted grapes, and Monterrei Tinto (red Monterrei), which must contain 60 percent Mencía and/or Merenzao.

Monterrei is one of the five Galician D.O.'s.

Los restos arqueológicos hallados en la comarca, tales como prensas, lagares excavados en roca y vasijas de origen romano, evidencian la participación de estos últimos en la introducción de la vitivinicultura en Monterrei.

Desde finales del siglo IX, de la mano de las órdenes religiosas, al ser utilizado el vino como tributo para el pago a los monasterios y señores feudales.

Durante la Edad Media y parte de la Moderna, Monterrei ejerció una gran influencia en aspectos económicos, políticos y culturales dentro de Galicia y España. Por este motivo, D. Federico Justo Méndez, autor del libro Brotes de Históricas, afirmaba: «los vinos del valle de Monterrei, por su excelente calidad se codearon con los vinos de Oporto, llegando incluso su comercialización a distintas partes de América. Durante la época del V Conde de Monterrey, a quien el Rey Felipe II le concedió el título de virrey con el fin de gobernar las nuevas colonias españolas en América.

Más recientemente, se puede destacar que, a mediados del siglo pasado, Monterrei fue una zona donde se producían grandes volúmenes de vino de excelente calidad. Muestra de ello fue la presencia en la región de importantes bodegas, que disponían de lagares  de piedra y grandes cubas de madera de roble.

A principios de los años 60 se construye la Bodega Cooperativa de Monterrei, con el objetivo de promover una correcta elaboración de los vinos y su posterior comercialización. A finales del siglo XX, la emigración, el cierre de la bodega cooperativa y el abandono de las tierras, dada su escasa rentabilidad, casi suponen la desaparición del viñedo en la zona, pero el reconocimiento administrativo de la Denominación de Origen y la aprobación de su reglamentación (por Orden de 25 de noviembre de 1994), así como la apuesta por los vinos de calidad, llevaron al resurgir de la comarca.

Es por lo tanto, en los años noventa el momento en que se da un gran salto cualitativo tanto en la recuperación de las variedades preferentes como en la elaboración del vino. Se siguen manteniendo las plantaciones con sistemas de formación en vaso griego, pero en muchas de las nuevas plantaciones se introduce un nuevo sistema de cultivo que se realiza en espaldera a doble cordón para facilitar el laboreo y la recolección. Esto, junto con la inversión en tecnología y la adopción de nuevas prácticas enológicas supuso un gran impulso al sector vitivinícola en la comarca. Al preservar un porcentaje elevado de variedades preferentes en la elaboración (todas ellas autóctonas), se obtienen como resultado vinos de características específicas, con carácter y que expresan la tipicidad de la zona.

En cuanto a los suelos, en la comarca de Monterrei están presentes tres tipos de suelos: Pizarrosos y esquistosos, idóneos durante las épocas de sequía, que proporcionan aromas en los vinos tintos. Graníticos y Arenosos: provenientes de la  degradación de las rocas graníticas, presentan pH bajos, adecuados para vinos blancos. Sedimentarios: complejos debido a la mezcla de materiales.